jueves, 9 de octubre de 2008

La cometa dorada, de Dezsö Kosztolányi

Título original: Aranysárkány)
Traducción de Marta Komlosy
Ediciones B. Colección Afluentes
333 páginas

Argumento
Termina el curso escolar en una ciudad de provincias húngara, sólo faltan los exámenes finales. Antal Novák es profesor de física y matemáticas, es viudo y tiene una hija adolescente llamada Hilda. Su vida transcurre tranquila hasta que su hija se revela en su contra y un alumno, buen deportista pero pésimo estudiante, decide cargar su frustración contra él.

Opinión
Me gusta mucho la cometa dorada, como libro, como título y como símbolo. En el segundo capítulo unos profesores, entre ellos el protagonista ven la cometa dorada que los chicos han hecho volar, uno de los profesores se queja de que en época de exámenes se pongan a hacer volar las cometas. Novák los defiende, piensa que hacer y volar una cometa es instructivo y bueno, siempre que no abandonen sus estudios. Así nos presenta Kosztolányi a este profesor: indulgente y positivo.
La cometa dorada es un símbolo de juventud, de libertad, de verano. Cuando Novák defiende que vuelen la cometa defiende también a los jóvenes que la vuelan, tiene fe en ellos. Pero las cosas no son como uno piensa y a Novák se le revuelven esos chicos a los que pretende instruir, y eso le desborda y le parece imposible de asimilar, ¿qué ha hecho mal?, se pregunta. Pero no hay respuestas.
El autor entra de lleno en la mente del profesor, la analiza, traza su estado de ánimo en cada momento, nos cuenta hasta las cosas que imagina, todo para hacernos participar en el tormento que vive Novák, sobretodo cuando un periódico que publica artículos contra los profesores se ensaña con él, deja al descubierto su intimidad, su fracaso, los terribles acontecimientos que cuestionan sus años como docente y como padre.
Insisto en que Kosztolányi es un gran psicólogo, me gusta mucho como dibuja a sus personajes y cómo presenta un paisaje humano tan lleno de matices, unos personajes complicados, incoherentes, tan humanos con sus imperfecciones que te parece conocerles. Porque Novák no es sólo un buen e indulgente profesor, es, además, un hombre taciturno y un poco cabezota al no perdonar a su hija, es desconsiderado con su prima Pepike, a la que llama cuando la necesita y luego no se acuerda más de ella.
Esta historia sirve también para recordar esos tiempos de exámenes finales, los nervios, la frustración de los suspensos y la alegría de los aprobados, y es que hay ciertas cosas que no han cambiado de un siglo para acá.
El final me gustó, me pareció extraño, no me esperaba el detalle final, pero luego he pensado que es un final bonito, poético, esperanzador y un poco mágico, que está muy bien para un libro tan lleno de realidad y de amargura.

2 comentarios:

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